La palabra de ella como prueba de cargo

De Violencia de Genero

Detener con "La palabra de ella como prueba de cargo" consiste en detener a un hombre solo porque la mujer haya dicho que él la agredio.

La jurisprudencia del Tribunal Supremo, en caso de delitos en los que sólo hay un testigo, la propia víctima, le da un valor extraordinario a su declaración, siempre que esta tenga tres características:

  • Que sea persistente en la incriminación: es decir, que declare lo mismo en todas las fases del procedimiento, sin incurrir en contradicciones.
  • Que haya ausencia de incredibilidad subjetiva: en román paladino, que la víctima no tenga motivos claros para buscar el mal del denunciado, como quedarse con la custodia de los niños, el piso o cosas similares.
  • Que haya evidencia periférica que corrobore la declaración: por ejemplo, la existencia de un parte de lesiones que, visto por el médico forense, le da una pátina de credibilidad adicional a la versión de la víctima.[1]

Referencias